Ve.
No voltees el
rostro ni aunque el viento sople hacia el lado opuesto.
No temas no
saber si llegarás, y ni si quiera a donde: recuerda que esos caminos ignotos pueden
llevarte a alguna certeza, o a la única.
No dudes de
la necesidad de tomar esa ruta. Quizás sea errada, o quizás no. Y no pienses,
por favor no pienses, que no es necesario. Que puedes hacerlo desde aquí.
Ve.
Encuentra. Encuéntrate.
Yo no voy a
ningún lado, por ahora. Por ahora o hasta que sepa de tu dicha, allá lejana.
Entonces,
quizás, yo también sabré que debo emprender ese camino. Para encontrarte, o
para decir adiós, sin vuelta.
Ve. Te lo
pido porque te amo. Te lo pide mi razón. Mi madurez. Mi equilibrio. Mi sensatez.
Corre. Corre
antes que mi corazón, inmaduro, desequilibrado e insensato, grite que me
ignores.
Ve.
No hay comentarios:
Publicar un comentario